El género musical del metal se originó en los años 60 y 70 en Inglaterra y Estados Unidos, y desde entonces ha evolucionado y diversificado en múltiples subgéneros. El metal se caracteriza por su sonido pesado, distorsionado y agresivo, y por sus letras que abordan temas oscuros como la muerte, el sufrimiento y la rebeldía.

Entre los subgéneros más destacados del metal se encuentran el heavy metal, el thrash metal, el death metal, el black metal, el power metal y el metal progresivo, entre otros. Cada subgénero tiene su propia estética y estilo musical, y ha ganado una gran cantidad de seguidores en todo el mundo.

El metal es un género musical que ha sido criticado por su agresividad y su contenido lírico oscuro, pero también ha sido reconocido por su capacidad para expresar emociones fuertes y para crear comunidades unidas por su amor por la música. Hoy en día, el metal sigue siendo un género influyente en la cultura popular y continúa evolucionando con nuevas bandas y nuevos sonidos.